Ruanda, el país de las mil cicatrices (PDF)
Un saco de arroz sube la colina en plena noche ruandesa, bien atado a una vieja bicicleta. Los grillos acompañan la suave ascensión. Eric, profesor de escuela en la región de Ntarama, arrastra la bici por el camino de arena que se abre entre bananeros, la memoria y un presente mejor atado que el saco de cereal.